Eficiencia energética en viviendas: más por menos

Se destacan tres aspectos principales para optimizar la eficiencia energética; éstos son: Diseño arquitectónico, en el que se consideran variables como buena orientación, que permita el aprovechamiento de la luz natural; distribución adecuada de las ventanas para asegurar más luz y calor, inclusión de elementos movibles como celosías, postigos y persianas; y recurrir a muros y cubiertas verdes compuestas por plantas que aumenten la aislación para el clima invernal y el de verano. Materiales: elección de éstos considerando su ciclo de vida y capacidad aislante; ventilación de aquellos que emitan gases como pintura al óleo, adhesivos de alfombras y los productos compuestos como las placas de madera aglomerada que contienen formaldehído; evaluación del gasto energético asociado al material elegido. Tecnología: utilización de ampolletas de alta eficiencia y ahorro energético como tubos fluorescentes; disminución de la capacidad del estanque del sanitario de 10 a 6 lts.; incorporar limitadores de caudal en duchas y mandos de lavatorios; utilización de calefacción con losa radiante, ecológicas al propiciar la inercia térmica en recintos que deben mantenerse calefaccionados; renovación de una cantidad de aire por persona.